En general, el pólipo en el útero constituye una patología benigna, aunque puede causar complicaciones, problemas de fertilidad o irregularidad de la menstruación. ¿Prevenirlos? No se puede, por lo que es necesario que sepas cómo detectarlos tempranamente.
En el post de hoy te explicamos qué es un pólipo en el útero, a qué factores de riesgos se asocia su crecimiento y cuáles son sus posibles tratamientos.
¿En qué consiste el pólipo uterino? Descripción
El pólipo en el útero es un abultamiento (excrecencia) que se forma en la capa mucosa que reviste internamente el útero, es decir, en el endometrio. Por esto, también se le suele denominar pólipo endometrial.
Este pólipo es causado por la multiplicación excesiva y anormal de las células en el endometrio. Es un tipo de abultamiento ovalado o redondo, cuyo tamaño puede variar, a veces mide escasos milímetros, pero en otros casos puede alcanzar o superar el tamaño de una pelota de golf, incluso pueden ocupar toda la cavidad del útero.
Causas y factores de riesgo: quién puede verse afectado por pólipos en el útero
Aún la ciencia desconoce la causa exacta de los pólipos en el útero. Sin embargo, según las investigaciones, estas formaciones en el endometrio pueden desarrollarse ante una mayor producción de estrógenos (hormona sexual femenina producida principalmente por los ovarios).
Además, existen varios factores que aumentan la posibilidad de desarrollar pólipos uterinos:
- La edad. Es más frecuente la aparición de pólipos endometriales en las personas entre 40 y 50 años, incrementándose el riesgo en la post menopausia. Esto se debe a los cambios hormonales que se presentan en estos períodos.
- El peso. También es un factor de riesgo tener sobrepeso o padecer de obesidad.
Otros de los factores de riesgo de crecimiento de pólipos en el útero es la hipertensión, tomar el medicamento tamoxifeno (para el tratamiento de cáncer de mama) o tener el síndrome de Cowden, una enfermedad hereditaria que causa la formación de tumores benignos.
¿Cuáles son los síntomas del pólipo uterino?
Los principales síntomas que producen los pólipos uterinos son:
- El sangrado vaginal, en la postmenopausia (manchado rosado, marrón o rojo).
- La irregularidad en los períodos menstruales, tanto en el ciclo como en la cantidad de flujo.
- Sangrado menstrual inusualmente abundante.
- Sangrado entre períodos menstruales.
- Sangrado después de tener relaciones sexuales.
Sin embargo, algunas veces no se presentan síntomas. En este caso los pólipos solo son detectados por el médico especialista. Por lo que se hace importante que mantengas las revisiones periódicas ginecológicas.
¿Los pólipos causan dolor?
El dolor no representa un síntoma común en este tipo de pólipo. No obstante, cuando los pólipos endometriales tienen un gran tamaño, sí que pueden causar dolor similar al cólico menstrual, en la parte baja de la espalda o en el abdomen.
¿Los pólipos causan infertilidad?
La infertilidad es una de las complicaciones que se asocian a los pólipos endometriales. En el caso de que tengas estos abultamientos en el útero y presentes problemas de esterilidad, existe la posibilidad de que la extracción o extirpación de los pólipos te ayude a quedar embarazada. Sin embargo, todo dependerá de cada caso específico.
¿En qué se diferencia un pólipo uterino de un mioma?
Tanto los pólipos como los miomas (fibromas uterinos) son abultamientos o crecimientos uterinos anormales, que suelen ser benignos.
Se diferencian por el tipo de tejido del que se forman. Los pólipos se forman del tejido delgado que reviste al útero, mientras que los miomas están constituidos por músculo liso.
¿Cómo se diagnostica el pólipo en el útero?
El diagnóstico del pólipo en el útero lo realiza el ginecólogo. En tu cita, el especialista te preguntará sobre los síntomas, tu ciclo menstrual, la duración, la frecuencia del período y otros detalles. Además, te realizará la exploración física y llevará a cabo un ultrasonido transvaginal, para explorar cualquier anomalía en el útero.
Para confirmar el diagnóstico o si se necesita mayor precisión en los resultados, el médico realizará:
- Una histeroscopia. Se trata de un procedimiento que dura entre 5 a 10 minutos, en el que se introduce una cámara exploratoria a través del cérvix uterino. Le permite al ginecólogo visualizar el interior del útero, realizar una biopsia o extirpar el pólipo.
- Una histerosonografía o ecografía de infusión salina. Es una técnica menos invasiva en la que, por vía vaginal, se inyecta suero fisiológico, después se toma la ecografía. Así el útero se expande y se obtiene una imagen clara y precisa de su interior.
¿Qué tipo de tratamiento existe para los pólipos endometriales?
La manera de tratar los pólipos endometriales dependerá de factores como la edad, los síntomas y los riesgos que acarrea a cada paciente.
Si te encuentras en edad reproductiva y no presentas ningún síntoma, es usual que el médico decida controlar por observación el abultamiento, muchos pólipos pequeños desaparecen solos.
Pero si está causando dolor, sangrado o algún otro síntoma, o si te encuentras en el período postmenopáusico, normalmente se opta por los siguientes tratamientos:
- Medicamentos para el equilibrio hormonal. Usados para aliviar la sintomatología. Normalmente, al dejar el medicamento los síntomas regresan.
- Polipectomía uterina. Procedimiento en el que se corta o extirpa el pólipo. Se suele realizar mediante la histeroscopia descrita arriba. Después el tejido es enviado al laboratorio para analizar su naturaleza.
- Este tratamiento es muy utilizado en mujeres en el período postmenopáusico, ante el sangrado anormal o cuando los pólipos causan infertilidad o problemas al embarazo.
Son muy bajas las probabilidades de que un pólipo sea canceroso, y después de extirpado es muy extraño que reaparezca. Aunque debe tenerse especial atención durante la menopausia.
La manera de prevenir los síntomas o cualquier consecuencia grave asociada a los pólipos uterinos es conseguir un diagnóstico precoz. Lo que solo se puede obtener visitando periódicamente al ginecólogo.
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