Para poder reaccionar adecuadamente ante la presencia de obstáculos en la calzada, detectar a tiempo la presencia de vehículos circundantes y reaccionar a tiempo ante situaciones imprevistas, es imprescindible que el conductor disponga de una visibilidad diáfana.
Pero ¿conoces exactamente qué es la visibilidad diáfana? ¿Sabes cuáles son los factores propios y ajenos al vehículo que permiten o imposibilitan que dispongas de una visibilidad diáfana mientras conduces?
¿Qué es la visibilidad diáfana y por qué es importante?
Aplicado a la conducción de vehículos, el concepto de visibilidad diáfana tiene un significado claro e inequívoco: un conductor dispone de visibilidad diáfana cuando tiene una visión clara y nítida de todos aquellos puntos del entorno del vehículo en los que pueden aparecer obstáculos o presentarse riesgos imprevistos.
Esto incluye la parte trasera del vehículo, sus laterales y las zonas adyacentes a los laterales.
Factores que afectan a la visibilidad diáfana
Son los que siguen:
- Estado del parabrisas, la luna trasera y las lunas laterales: cualquier desperfecto en esos elementos, aunque sea de poca importancia, puede dificultar la visión o alterar la percepción visual del entorno, especialmente si es de noche y las condiciones meteorológicas son adversas.
- Posición de algunos elementos del vehículo: especialmente, la de los espejos retrovisores. Además, la posición de los reposacabezas o la presencia de ciertos accesorios (como objetos colgados del retrovisor o alerones en la parte trasera) pueden impedir que el conductor disponga de la visibilidad adecuada.
- Iluminación exterior del vehículo: en condiciones meteorológicas adversas y de noche la visibilidad nunca llega a ser totalmente diáfana, pero la falta de visión se agudiza si el sistema de iluminación exterior no funciona a pleno rendimiento.
- Limpiaparabrisas: la lluvia, la nieve, la niebla y el granizo pueden reducir significativamente la visibilidad. Por ello, es importante que los limpiaparabrisas estén en buen estado y que los sistemas de desempañado funcionen correctamente.
Importancia de la visibilidad diáfana
La visibilidad diáfana es imprescindible para:
- Conducir de la forma más segura posible: una visibilidad perfecta permite al conductor detectar los riesgos y realizar las maniobras evasivas con mayor antelación.
- Reducir la fatiga visual y aumentar el estado de alerta del conductor: esto se traduce en que se reduce el tiempo de reacción ante posibles obstáculos o situaciones de riesgo.
¿Cómo mejorar la visibilidad diáfana del coche?
Las acciones a realizar son las que siguen:
- Asegurarse de que la iluminación y los limpiaparabrisas cumplen su función a pleno rendimiento.
- Colocar los espejos en la posición correcta y verificar que ningún accesorio interfiere en los ángulos de visión.
- Ajustar el asiento y los espejos para conducir en una posición cómoda, sin que esto afecte a las líneas y ángulos de visión.
- Mantener en perfecto estado y limpios todos los retrovisores y lunas del vehículo, así como los sistemas de desempañado de esos elementos, si es que los tienen.
Respecto a la última acción recomendada para gozar de una visibilidad diáfana, desde GRUPO PACC recordamos que buena parte de los seguros de coche (concretamente, los de las modalidades “a terceros ampliado” y “a todo riesgo”) incluyen la cobertura de reparación y sustitución de lunas deterioradas.