En la actualidad cada vez más personas están comenzando a realizar cambios en su alimentación y a introducir nuevos hábitos de vida saludable en el día a día. Ya está ampliamente demostrado que llevar un estilo de vida saludable ayuda a mejorar la relación con la comida, disminuir el estrés y controlar los índices de colesterol.
Poder disfrutar de una vida saludable es mucho más que ir a hacer deporte eventualmente y comer algo de verdura: la vida saludable comporta una serie de elementos y un conjunto de acciones a lo largo del día o teniendo presente diferentes aspectos de la salud.
Antes de comenzar con un cambio de hábitos es recomendable acudir a un especialista médico, una opción facilitada en muchas ocasiones por los seguros de salud, para que evalúe en qué situación te encuentras realmente, y te ayude a marcar unos objetivos a alcanzar. Siempre es recomendable realizar ciertos análisis y pruebas médicas para ir cerciorándose de que los cambios están siendo beneficiosos para el organismo.
A continuación vamos a tratar de identificar los hábitos de vida saludable básicos por los que cualquiera debería comenzar en este proceso:
1. Beber dos litros de agua al día
Es un hábito que los expertos siempre intentan inculcar a los usuarios. No es necesario que sean exactamente dos litros, pero se aconseja este mínimo de agua sobre todo para que las personas que no acostumbran a beberla y que consumen otras bebidas (como refrescos) empiecen a habituarse a ella y a sustituir la ingesta de refrescos por la de agua.
Y recuerda que no tienes que ir continuamente con una botella bajo el brazo; muchos alimentos contienen una gran cantidad de agua, como la mayoría de las frutas y verduras, por lo que su consumo habitual te ayudará a mantener este hábito de hidratación.
2. Aprender a leer las etiquetas de los productos
Es una de las más complicadas, pero a la vez una de las más importantes. Es aconsejable buscar información y comenzar a formarse al respecto, dado que en ocasiones la industria alimentaria intenta vender productos con una apariencia saludable cuando en realidad no lo son. Esto degenera en que millones de personas consuman algo que no es bueno para su salud sin ser 100 % conscientes de ello.
3. Llevar una vida activa y realizar ejercicios específicos
Para tener buena salud es necesario llevar una vida activa, el usuario debe intentar realizar el máximo posible acciones físicas, como subir por las escaleras, ir en bicicleta o no coger un vehículo frecuentemente para distancias medias o cortas.
Además, debe añadir la ejecución de algún deporte específico de manera semanal, como ir al gimnasio y practicar ejercicios aeróbicos como spinning, zumba, cardio-box o musculación en la sala de máquinas. Y es que el cuerpo funciona mejor cuando se mantiene activo de manera sistemática.
4. Aprender a comer de manera equilibrada
La alimentación es uno de los puntos clave de llevar una vida saludable y es indispensable que el 80 por ciento de la comida esté basada en proteínas magras, frutas, verduras y cereales integrales.
El resto de los alimentos procesados o ultra-procesados deben ser consumidos solo de manera ocasional, pues su composición no beneficia al organismo, pudiendo ocasionarnos enfermedades como diabetes o colesterol si su consumo es frecuente. Por este motivo, y tal como se ha mencionado anteriormente, es imprescindible aprender a leer las etiquetas de los productos.
Y sobre todo intentar eliminar lo máximo posible el azúcar refinada de la dieta, ya que está sobradamente demostrado que es adictiva y causa serios daños al organismo.
5. Contar con un especialista
Siempre es buena idea averiguar cuál es el mejor seguro de salud en función de nuestro presupuesto y necesidades particulares para así poder contratar sus servicios. Y es que para llevar una vida saludable es necesario realizarse de manera periódica revisiones médicas.
Esto facilita que podamos cerciorarnos regularmente de que todos los nuevos hábitos estén siendo beneficiosos para el cuerpo. La sanidad pública tiene ciertas restricciones a la hora de repetir las pruebas diagnósticas y por ello, una de las mejores maneras de poder ejecutar todos estos reconocimientos médicos es disfrutando del mejor seguro de salud que nos ofrezcan.